La teoría Z fue desarrollada por el llamado estilo de “administración japonesa” del Dr. William Ouchi, popularizado durante el auge económico asiático de la década de 1980.
Para Ouchi, la Teoría Z se centró en aumentar la lealtad de los empleados hacia la empresa brindándoles un trabajo de por vida con un fuerte enfoque en el bienestar del empleado, tanto dentro como fuera del trabajo.
Según Ouchi, la gestión de la Teoría Z promueve el empleo estable, una alta productividad y una alta moral y satisfacción de los empleados.
El profesor Ouchi pasó años investigando empresas japonesas y examinando empresas estadounidenses utilizando estilos de gestión de la Teoría Z. En la década de 1980, Japón era conocido por tener la productividad más alta del mundo, mientras que Estados Unidos había caído drásticamente.
La palabra "Wa" en japonés se puede aplicar a la Teoría Z porque ambas promueven asociaciones y trabajo en grupo. La palabra "Wa" significa círculo perfecto o armonía, lo que influye en que la sociedad japonesa esté siempre en equipo y llegue a una solución juntos.
Promoviendo la Teoría Z y la palabra japonesa “Wa” es como la economía japonesa se volvió tan poderosa. Y también, debido a que los japoneses muestran un alto nivel de entusiasmo por el trabajo, algunos de los investigadores afirman que Z en la teoría Z significa "celo".
Ouchi escribió un libro llamado “Teoría Z: Cómo las empresas estadounidenses podrían enfrentarse El desafío japonés” (1981). En este libro, Ouchi muestra cómo las corporaciones estadounidenses pueden enfrentar los desafíos japoneses con un estilo de gestión altamente efectivo que promete transformar los negocios en la década de 1980.
El secreto del éxito japonés, según Ouchi, no es la tecnología sino una forma especial de gestionar a las personas. Esto es un estilo de gestión que se centra en una sólida filosofía empresarial, una cultura corporativa distinta, el desarrollo del personal de Jong-range y la toma de decisiones por consenso.
Ouchi muestra que los resultados muestran una menor rotación, un mayor compromiso laboral y una productividad dramáticamente mayor.
William Ouchi no dice que la cultura empresarial japonesa sea necesariamente la mejor estrategia para las empresas estadounidenses. Aún así, toma japonés. técnicas comerciales y las adapta al entorno corporativo estadounidense.
Además, los trabajadores de la Teoría Z tienen una gran necesidad de contar con el apoyo de la empresa. Valoran mucho un entorno de trabajo en el que elementos como la familia, las culturas, las tradiciones y las instituciones sociales se consideren tan importantes como el trabajo mismo.
Estos trabajadores tienen un sentido bien desarrollado del orden, la disciplina, la obligación moral de trabajar duro y un sentido de cohesión con sus compañeros de trabajo.
Finalmente, se supone que se puede confiar en que los trabajadores de la Teoría Z harán su trabajo al máximo de sus capacidades, siempre y cuando se pueda confiar en que la dirección los apoyará y velará por su bienestar.
Una de las piezas más importantes de esta teoría es que la dirección debe tener un alto grado de confianza en sus trabajadores para que este tipo de gestión participativa funcione. Esta teoría supone que los trabajadores participarán en gran medida en las decisiones de la empresa.
Ouchi explica que los empleados deben tener mucho conocimiento sobre los diversos temas de la empresa, además de poseer la competencia para tomar esas decisiones. Sin embargo, también señala que la dirección a veces tiende a subestimar la capacidad de los trabajadores para contribuir eficazmente al proceso de toma de decisiones.
Pero por esta razón, la Teoría Z enfatiza la necesidad de que los trabajadores se conviertan en generalistas más que en especialistas y aumenten su conocimiento de la empresa y sus procesos a través de rotaciones laborales y capacitación constante.